El domingo estuvimos en Corró d’Amunt, la última prueba de la Challenge Resistencia del Valles; después de conseguir junto Tomi la victoria en la prueba de Lliça d’Amunt y en Bigues de Riells llegamos a la última prueba con opciones a la victoria en la clasificación general final.
En la salida estaban todos los equipos que han seguido las cuatro pruebas del certamen de resistencia, además del equipo Segú con Santi y Marc, los cuales nos lo pusieron difícil en la prueba de Lliça d’Amunt y seguro que en Corró no nos lo pondrían fácil, y más conociendo como nos conocemos de entrenar juntos.
A diferencia de como lo hicimos en Bigues i Riells aquí la estrategia no cambio, y cada relevo era de una vuelta, Tomi se medía a Santi Segú y Marc y yo hacíamos el otro relevo; igual que en las otras dos carreras empecé yo la carrera, el circuito de tres kilómetros no tenía nada que ver con lo que nos tienen acostumbrados en Corró, era un circuito 100% pista con bastante desnivel. De salida en la primera subida ya me coloqué tercero y fui allí esperando a que maduraran los dos de delante para después poder irme hacía delante. Al final, a falta de poco más de dos cientos metros de llegar arriba cambie el ritmo llegando arriba junto a Marc del Segú, rodando los dos hasta dar el relevo en meta haciéndolo con diferencia de tiempo que no dejaría de crecer en toda la prueba con el resto de equipos. Los dos equipos nos vigilamos durante el inicio de la prueba habiendo incluso algún ataque mutuo pero que no sirvió para nada.
Todo iba bien, la carrera no estaba siendo una agonía e íbamos todos bastante bien, pero a la hora y media -de tres- la cosa cambió. Estaba haciendo mi relevo y rodaba tras Marc, no íbamos despacio, era un falso llano en bajada haciendo curvas rápidas en la zona alta del circuito, Marc hacía una trazada diferente todas las vueltas en una de las curvas y quise cambiarla para ver si se ganaba algo, la verdad es que era un poco más rápida, pero lo que no me esperaba es que cuando fui a pedalear mi pedal golpearía con la cepa de un árbol cortado y me haría salir despedido de la bicicleta por orejas cayendo sobre la rodilla y el brazo izquierdo. Aquí sucedió algo que recordaré siempre. Marc al oír mi caída se paró y al ver que no me podía levantar vino ayudarme, me ayudó apartarme del camino y aparto la MMR de en medio del camino, me miro la rodillo que ya se había hinchado y me dijo que no tenía nada roto, otro corredor del T-Bikes también se paró y ambos estuvieron conmigo hasta que pedí que que me ayudaran a ponerme en pie y entre los dos me ayudaron a subirme a la bicicleta para poder continuar. Quedaba un pequeño trozo de subida y la bajada final a meta. Marc me fue empujando hasta mi llegada a meta para poder dar el relevo en tercera posición, además, se ofreció a arreglar mi bici, cambiar el pedal que acababa de partir al golpear con la cepa del árbol. Arreglamos la bici gracias al pedal de Adri Tous y me fui directo a la ambulancia, allí me aplicaron un punto de sutura en la rodilla y así pude seguir y poder terminar la prueba.
Una vez volviendo a dar vueltas me encontraba bien, aunque al final, los últimos relevos en la primera subida se me hacía larga y siempre me acababa descolgando un poco para después volver a enlazar terminando la carrera en segunda posición a seis segundos de los primeros, el equipo Segú, quienes se merecían la victoria en toda regla por todo lo que hicieron y sobretodo por la buena gente que son. Gracias por que es difícil encontrar gente aún con tan buen corazón en el mundo de la competición.
Con la segunda posición nos alzamos con la primera de la general final y a la postre los Segú se alzaron con la tercera, gran jornada para terminar la temporada oficialmente.
Arnau Planas 